El 2018 ya está aquí y con él comienza una nueva temporada de «Propósitos de Año Nuevo», una oportunidad en la que nos proponemos nuevas metas cuya finalidad es lograr una mejor versión de uno mismo.
Si eres de los que apuesta por la salud, en este post te ofrecemos 6 sencillos consejos que te vendrán de lujo para conseguir aquello que te propongas.
- Escoge el propósito adecuado
¡Asegúrate de elegir una meta posible y que realmente desees! Puede parecer una obviedad pero realmente no lo es. Tendemos a marcarnos propósitos que no nacen de nosotros mismos sino cuyo origen es externo, sugerido por la moda o una tercera persona.
Antes de ponerte manos a la obra deberías de hacerte estas preguntas: ¿Para qué quiero hacer el cambio?, ¿Qué me hace a mi feliz?, ¿Qué tipo de persona quiero ser?, ¿Es el momento adecuado para intentarlo?… Si tras las respuestas te ves 100% convencido y con ganas de empezar, no lo dudes y ¡a por ello!
- Elimina las tentaciones
Identifica todos los obstáculos que te pueden frenar a la hora de conseguir tu meta y busca como solventarlos. Limpia la despensa y la nevera de productos no deseados, organiza las comidas de la semana (batch cooking), haz una lista de la compra (si no compras los productos indeseados es más fácil que no los consumas), convence a un amigo para hacer ejercicio contigo… Busca las estrategias que te faciliten el cambio.
- Piensa en asaltos
No intentes abarcar más de lo que puedas gestionar. Un cambio completo y permanente en el estilo de vida no es algo fácil de conseguir. Debes dosificar tu esfuerzo e ir instaurando pequeños cambios que te permitan ir acumulando progresivamente pequeñas victorias para conseguir ganar la batalla final.
- Realiza un seguimiento de tu progreso
Para mantenerte motivado es muy importante que seas consciente de si vas por el buen camino. Para ello, te aconsejamos que determines los pequeños cambios que quieres instaurar en tu rutina y que evalúes cada día hasta qué punto lo estas consiguiendo.
- Refuerzo positivo
Todo esfuerzo requiere su recompensa, pero a veces la motivación comienza a aterrizar antes de que el avión llegue a su destino. Para que esto no te ocurra te aconsejamos lo que en psicología se conoce como “refuerzo positivo”. Si consigues un objetivo, te recompensas con algo que te agrade, siempre que no interfiera con tu meta.
- Caer no es fracasar, es normal
Si nuestro propósito fuese aprender a patinar sería normal esperar que alguna vez nos vayamos a caer, lo importante es levantarse y seguir patinando. Si un día no fuiste capaz de cumplir con tu meta ¡no te obsesiones! Se comprensivo contigo mismo y piensa que el camino es largo y que mañana se te brinda una nueva oportunidad para apuntarte otra victoria. Recuerda que siempre puedes pedir ayuda a un dietista-nutricionista que te proporcionará las herramientas que necesitas para mantenerte motivado y bien encaminado.
Ahora toca llevar los consejos a la práctica y para ello te proponemos el siguiente juego.